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Marilena Sommer: «No creo que los robots sean capaces de amar»

Marilena Sommer. Foto: Maeva

Marilena Sommer: «No creo que los robots sean capaces de amar»

El amor es un proceso complicado llegó a las librerías hace unas semanas, para sumergirnos en el mundo de la Inteligencia Artificial (IA) aplicada a las relaciones humanas. Ahora, su autora, Marilena Sommer, nos explica qué opina sobre si esta tecnología podría sustituir las actividades cotidianas que lleva a cabo el ser humano. Y algo más controvertido: si podría surgir el amor entre robots. ¿Nuevos proyectos literarios? Uno de corte romántico del que aún no puede dar muchos detalles.

Sara Niño para InMagazine

IM: ¿Cómo surgió la idea central de la novela El amor es un proceso complicado? ¿Le llevó mucho tiempo o tuvo claras las ideas rápidamente?

Marilena Sommer: La idea central de la novela me vino de repente, así, como una inspiración. Construir la novela en torno a ella me llevó unos cuantos años, pero eso se debe probablemente a que era la primera que escribía. El punto de partida para escribir este libro fue también lo que más tarde se convirtió en uno de los mayores giros argumentales que la mayoría de los lectores no esperarían en una comedia romántica STEM. Pero no lo desvelaré para no hacer spoiler

IM: ¿Piensa que el amor es un proceso complicado? En ese caso, ¿qué es lo más complicado de una relación de pareja?

Marilena Sommer: No creo que el amor sea en realidad un proceso tan complicado. Al fin y al cabo, es lo que todos esperamos encontrar. Pero, sin duda, puede tener fases complicadas, sobre todo en las relaciones duraderas. En el caso de la protagonista femenina de mi novela, Charlie, la pregunta que se plantea es si la felicidad está en otro lugar. Para mí, creo que una de las cosas más difíciles es ser compasivo y comprensivo con una pareja a largo plazo. Por otro lado, también creo que es la clave de una relación feliz y duradera. 

Los asistentes virtuales, cada vez más empoderados

IM: Los robots (Inteligencia Artificial) juegan un papel destacado en la historia de esta novela. Usted, como divulgadora científica, ¿qué nos puede decir sobre la inmersión de esta tecnología en materia de sentimientos?

Marilena Sommer (M. S.): En El amor es un proceso complicado, Charlie programa a una asistente virtual «empoderada» llamada Emily, que parece tener una mente propia y, por tanto, también sentimientos propios. Lo que ya estamos viendo en el mundo actual es que los robots se utilizan en el sector sanitario y que pueden tener efectos positivos en las personas. Un ejemplo es PARO, un robot que presenta la forma de una foca de peluche y que tiene fines terapéuticos. Veremos más ejemplos como este en el futuro, aunque el nivel de aceptación de estas tecnologías seguro que variará.

IM: ¿Cree que, en un futuro, surgirá el amor entre robots? ¿O que, incluso, estos podrían sustituir a los seres humanos?

M. S.: Me parece una pregunta fascinante. En cualquier caso, lo que ya conocemos son robots que interactúan entre sí. Y, aunque hoy en día casi nada parece imposible, no creo que los robots sean capaces de amar.

La cuestión de si puede haber relaciones románticas entre humanos y robots es objeto de debate en novelas y películas desde hace mucho tiempo. Basta pensar en el clásico de ciencia ficción Her (2013). Sin embargo, no creo que los humanos lleguen a ser sustituidos, ni siquiera en un futuro lejano. Los sistemas de IA suelen entrenarse únicamente para subáreas específicas. El sistema que derrote al actual campeón mundial de ajedrez humano seguramente no será capaz de vaciar un lavavajillas, así que estamos muy lejos de una «IA fuerte» buena en muchas cosas a la vez, y mucho menos en todo.

Quizá soy demasiado optimista, pero sigo creyendo que lo que los humanos somos capaces de hacer, especialmente habilidades como la empatía, nunca podrá trasladarse por completo a una tecnología.

¿Una película basada en El amor es un proceso complicado?

IM: ¿Cuáles son los próximos avances en IA que se avecinan?

M. S.: ¿Asistentes de voz empoderadas? No, bromas aparte (lo siento, Emily); en la actualidad se está avanzando mucho en todo tipo de áreas en lo que respecta a la IA. Es muy probable que veamos grandes avances en IA Generativa y Grandes Modelos de Lenguaje (por ejemplo, ChatGPT), en sanidad y en tecnologías autónomas.

Aunque hay algunos avances y tendencias dignos de crítica, sigo confiando en que las tecnologías de IA puedan ayudarnos también a encontrar soluciones innovadoras para afrontar los mayores retos de la actualidad. Y, personalmente, también apuesto por la conducción autónoma, porque soy una conductora terrible.

Un proyecto en vuelo del que próximamente sabremos más

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El amor es un proceso complicado, de Marilena Sommer. Foto: Maeva

IM: ¿Podría tener una segunda parte El amor es un proceso complicado? ¿Y una serie de televisión o película?

M. S.: Desde luego que sí. Podría haber una continuación del «proceso complicado». Seguro que me interesaría explorar qué ocurre con personajes secundarios como Maxi o Sarina, por ejemplo. Y si alguien decidiera convertir el «proceso complicado» en una película, sería un gran sueño hecho realidad. Puedo imaginarme a Emily en particular desenvolviéndose de maravilla en la pantalla.

IM: ¿Tiene en estos momentos algún otro proyecto literario entre manos?

M. S.: Pues sí. A menudo tengo muchas ideas diferentes rondándome por la cabeza al mismo tiempo, pero ahora estoy trabajando en un proyecto romántico, aún secreto, que va a ser super emocionante. Me muero de ganas de contaros más sobre él… cuando me lo permitan. 

IM: ¡Gracias por atendernos!

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